domingo, 19 de septiembre de 2010

La maca





La planta, conocida en Quechua como maca, maka, maino, ayak chichita, ayak willku; en
Español, maca; en Inglés, maca, Peruvian ginseng, es nativa de la sierra central de los Andes del Perú, donde se le cultiva desde hace muchos siglos por sus raíces engrosadas, que son comestibles.

La planta de maca es herbácea y se caracteriza por la formación de una roseta de tallos cortos y decumbentes con numerosas hojas y que crece casi pegada al suelo, lo que le confiere una gran tolerancia a las heladas. Dentro del suelo, la parte del tallo que se encuentra debajo de los cotiledones (hipocotilo) adquiere una estructura carnosa que se integra con tejido radicular y termina en una raíz gruesa con numerosas raíces laterales absorbentes. Este hipocotilo-raíz es tuberosado, suculento y en forma de nabo y es la parte comestible. Los cultivares de maca que existen en la actualidad se diferencian mayormente por el color de los hipocotilos-raíces que pueden ser blanco, amarillo, gris, morado, negro, amarillo con morado y blanco con morado.

Tradicionalmente, las grandes áreas de cultivo se encontraban en el Departamento de
Junín, en muchas comunidades de los distritos de Ondores, Huayre, Carhuamayo, Tarma
y Junín, y en el Departamento de Pasco en Ninacaca, Yanachachi y Vicco.
Recientemente, su cultivo se está extendiendo a otros Departamentos como
Huancavelica, Ayacucho, Apurímac, Cusco y Puno. Todas estas localidades están
ubicadas en las zonas agroecológicas Suni y Puna, con una elevación entre los 3500 y
4500 m.

Los hipocotilos-raíces frescos de la maca contienen 80% de agua y cuando están secas tienen un valor nutritivo parecido al del maíz, arroz y trigo. Su composición incluye 55-60% de carbohidratos, 10-12% de proteínas; 8-9% de fibra y 2-3% de lípidos. La maca contiene cantidades grandes de aminoácidos esenciales y niveles altos de hierro y calcio. También contiene ácidos grasos, de los cuales el linolénico, palmítico y oleico son los más importantes. También contiene esteroles y alcaloides.

La propiedad más importante conocida en la tradición Andina es su efecto en la fertilidad; ésta es la cualidad principal atribuida a la maca desde el Siglo XVI, y considerada como uno de los factores para el aumento de la población en las zonas más altas del Perú. También se le usa para tratar la frigidez, impotencia sexual y la debilidad mental

Otra propiedad medicinal atribuida a la maca es su efecto anticancerígeno. La maca es también tradicionalmente usado como un regulador de alteraciones de la menstruación y la menopausia, y alivia el insomnio y la disminución de la audición y la visión. Además, esta planta se ha usado desde tiempos inmemoriales por sus propiedades para revitalizar, para tratar la malnutrición, ayudar a la convalecencia y restaurar la habilidad física y mental.

La actual tendencia en Europa, EEUU y Japón, donde los consumidores se preocupan mucho por el cuidado de la salud, es el consumo de productos naturales, lo que permite que productos como la maca, con alto valor energético y nutracéutico, puedan tener una gran demanda.

Fuente:
http://www.indecopi.gob.pe/

Cerámica de Chulucanas






Chulucanas es un pequeño pueblo situado a 1 hora de viaje en auto de la ciudad de Piura, a 1000 km. de Lima, en la costa norte del Perú. Los habitantes de este pueblo son descendientes de los tallanes y Vicús, antiguos habitantes precolombinos de esta región, quienes desarrollaron la cerámica en negativo que hoy podemos apreciar en algunos museos bajo el nombre de Vicus. Dicha técnica de decoración se ha convertido en la principal característica de la Cerámica de Chulucanas.

De la cultura Tallan, heredan la técnica del paleteado, que es un método muy singular de modelar vasijas tan solo utilizando una paleta de madera y una piedra redondeada, se golpea la parte externa de la vasija y rítmicamente con la paleta mientras por el interior con la piedra, a manera de yunque, se va adelgazando y dando forma a la vasija, gracias a la práctica y habilidad del alfarero ceramista.

Una vez hecha la forma y en estado de cuero, se pinta con engobes hechos con arcillas y pigmentos. Luego viene una de las etapas más importantes del proceso: el bruñido o pulido, que consiste en frotar toda la superficie visible con piedras de río de diversas formas y tamaños, a fin de lograr que esta superficie quede completamente satinada y homogénea.

Una vez seca, la cerámica va al horno de leña y se quema a una temperatura de entre 700 y 900o C aprox. Estos hornos son construidos por los propios artesanos y alfareros en forma artesanal, y utilizan la leña (pedazo de tronco del Algarrobo) para hornar los ceramios.

La siguiente etapa es la decoración o barbotinado: se emplea aquí arcilla liquida para cubrir aquellas áreas que se desean mantener intactas y se deja al descubierto aquellas que se desean oscurecer. A esta técnica se le conoce como "reserva" o negativo. La pieza así decorada entra al horno de ahumado, en donde se han acondicionado hojas de mango. Durante esta quema de reducción, la hoja de mango empleada como combustible producirá no solo el humo que oscurecerá la cerámica, sino también una resina que al adherirse a la cerámica le dará el brillo característico del estilo Chulucanas.

La siguiente etapa consiste en retirar las piezas del horno de ahumado, limpiarlas, sacándoles la barbotina y darles el acabado final con ceras y betunes, frotándolas hasta dejarlas con un satinado impecable. Cuando se trata de piezas utilitarias, como vasijas y floreros, se les aplica además una solución impermeable que permite retener agua en un 95%.

Fuente:
http://www.regionpiura.gob.pe/